La figura del alero Kevin Durant se agrandó aún más cuando el gerente general de los Guerreros de Golden State, Bob Myers, reconoció que sin las concesiones salariales que jugó el Jugador Más Valioso (MVP) de las pasadas Finales de la NBA, el núcleo del Equipo no hubiese podido seguir intacto.
Durant y no su fue de la gestión lo que realmente permitió a los guerreros ganan un campeonato de la NBA durante su primer año con ellos, y después de que el equipo sigue siendo el mismo la próxima temporada.
Myers, ganador del premio de Ejecutivo del Año, se reunió con periodistas el viernes por primera vez desde el desfile en el centro de Oakland para celebrar el segundo campeonato de los Guerreros en tres años.
Durante la sesión de 20 minutos, Myers abordó varios asuntos, pero repetidamente movió la conversación a la decisión de Durant de tomar un recorte de salario y firmar un contrato de dos años por aproximadamente 53 millones de dólares en el lugar de un acuerdo máximo.
Esa acción fue, de acuerdo a Myers, el movimiento clave para volver a firmar a los jugadores como la escolta Andre Iguodala, al base Shaun Livingston y el mismo viernes al pívot georgiano Zaza Pachulia por una temporada más y 3,5 millones de dólares.
“Su gesto de tomar menos dinero en la capacidad de ser muy agresivos en la búsqueda de Sean y Andre”, admitió Myers. “Puedo decir de manera inequívoca que sin el él, ningún estaríamos mirando al equipo que tenemos ahora mismo.
Durant, de 28 años, había sido inflexible acerca de su deseo de mantener el núcleo de la lista de Guerreros juntos después de que salió de Oklahoma City Thunder para firmar con Golden State hace un año.
Su nuevo contrato será de 25 millones en 2018, con una opción de jugador para 2019, se espera que Durant baje la opción y después de firmar por el máximo.
Durant, siete veces seleccionado al Partido de las Estrellas, tenía la posibilidad de ganar 36 millones de haber firmado un acuerdo máximo esta temporada.
Sin embargo ganará aún menos el próximo año de lo que lo hizo este año, que tampoco fue de los mejores pagados.
Eso abrió la puerta para que los guerreros le dijesen a Iguodala, ganador del MVP en las finales de 2015, un contrato por tres temporadas y 48 millones de dólares garantizados; Livingston (tres años, 24 millones) y el ala-pívot David West (un año, 2,3 millones).
Pero lo más importante, que los guerreros también consiguieron el fichaje de la escolta Nick Young, que dejó a Los Ángeles Lakers, y firmaron por una excepción de nivel medio de 5,2 millones de dólares.
Sin la postura de equipo y compañerismo mostrada por Durant, nada de lo anterior hubiese sido posible obtener por los Warriors, al margen de la gestión que pudiera haber realizado el propio Myers.
“Lo hizo por su propia voluntad, lo que hace mucho más impacto y impresionante para mí”, subrayó Myers. “Su figura perdurará para siempre, dado que hace algo como eso es digno de elogio y lo coloca en una posición única dentro del mundo no sólo de la NBA sino del profesionalismo”.
El director de los guerreros agregó que estaba ahí la verdadera filosofía de grupo, de compañerismo y de unión que demostraban los guerreros en el campo y por lo que los aficionados disfrutan verlos jugar.
“Esa es la razón por la cual la gente disfruta viendo a nuestro equipo, la despreocupación de la forma en que jugamos en el campo, sin egoísmo por parte de nadie”, subrayó Myers.
La manera tan agresiva y rápida como se movió los equipos en el mercado de los agentes libres en la función de ver cómo podían realizar más cerca de los guerreros también había algo que le impresionó.
“De ahí lo importante de mantener nuestro equipo unido y tan fuerte como podamos”, destacó Myers. “Yo estaba preocupado, por ser honesto, de que no hay poder traer de vuelta a los jugadores de los mismos. Mi pensamiento era era un empeorar y la gente sin reprocharía”.
Joven se lanzó a los campeones reinantes de la NBA después de pasar las últimas cuatro temporadas en la reconstrucción de los Lakers.
La decisión de Young se produjo después de reunirse con Durant, el entrenador de los Guerreros, Steve Kerr, y Draymond Green durante un viaje de reclutamiento en Los Ángeles.
El siguió verde con más mensajes del texto antes de que el joven firmó, y también estuvo también la clave de su llegada, que será muy importante para el futuro del equipo.